June 09, 2013

Paula, Isabel Allende.


De la escritora Isabel Allende he dicho varias cosas. Entre ellas, que el mejor libro fue Afrodita y también que me negaba esquizofrénicamente a leer Paula. Tenía mis razones, aunque usted no lo crea, entre ellas que siempre he detestado que alguien haga misas y piñatas a causa de una tragedia y que por supuesto saque provecho (dinero) de la víctima y que seduzca al lector morboso. Estoy equivocada, o como quièn dice se me escapó un pescado de la red, intento atraparlo pero se me desliza de las manos.


El pez por la boca muere dice el refrán, refrán que me alcanzó y me pescó, ahora soy yo la que está en la red. ¿Cómo vine a parar aquí? No sé, sólo sé que estoy leyendo Paula. Que lucho como ese pescado intentando regresar al mar, a vivir entre las aguas a luchar con otros monstruos de mar gigantes, a esconderme entre las cuevitas o entre las anémonas lo que me llevaría a ser un pez payaso, lo más raro de todo es que no sé nadar, quedo descartada como pez, pero no de payaso. (sigamos. . .)


Tengo una calcomanía que dice: "ser payaso es exponer el alma al viento frío, desnudarse de manera total para que el otro que vea todas las debilidades que tenemos dentro" -no sé quién lo escribió- sólo sé que esto aplica ahora que leo a Isabel Allende en Paula.
Todas las personas que conozco y leyeron el libro han llorado, y cómo no, el principio es triste. Muy triste. Isabel Allende nos comparte su sufrimiento desde el primer párrafo, su hija en coma y ella le dice: "hija si tu resistes yo también resistiré", como un viento frío, así comienza, asi expone al lector que no está en una novela inventada, el lector lee a una madre. El lector se quedó desnudo. Expuesto.


El lector, -y antes que siga hablando en tercera persona como "desordenada mental" debo decir que el lector soy yo y quién se identifique- familiarizado con la escritora debe sentirse muy privilegiado al saber que no llorará solo y que conocerá un estilo de narración único y que tomado desprevenidamente soltará la carcajada. Del llanto al descubrimiento de un linaje. Creo que se nos caerá el maquillaje. Introspección le llamaré a la primera parte.



P.D. cuando avanze en la lectura, avanzaré en la reseña. Arrieros somos. . .
P.D. 2: ¡He dicho!





June 08, 2013

TUITCORRIDOS -tercer cargamento-


¡Quién lo imaginarìa!

Con esta entrega y llevamos 3 entregas de Tuitcorridos de 4 kilos de letras, espacios, signos de puntuaciòn y por supuesto el peso y la pureza de la historia detràs de cada uno de los autores. Vean, que como punto principal todos tienen "intriga" punto de màs para hacerlos atractivos porque no siempre es el final que nos esperamos, eso de alguna forma acentùa el estilo de un Tuitcorrido que evita meternos en la tragedia.

¡Basta! que es hora de presentarlos y consumirlos.


"MAÑANA DE SÀBADO"
@OraBx


1. Durante mi temprana adolescencia, la casa donde vivíamos con mi familia tenía un garaje de forma alargada.

2. En él, cabían dos carros, uno detrás de otro.

3. Para sacar el carro del fondo, había que mover primero el carro de atrás; el que quedaba frente a la puerta de la calle.

4. Regularmente, los sábados usábamos el carro que menos se usaba entre semana, que era el que se estacionaba al fondo.

5. Lo que narro ocurrió un sábado, que pintaba como uno cualquiera.

6. Escuché desde mi habitación, cómo abrían la puerta del garaje, y cómo mis padres encendían los motores de los carros.

7. Oí cómo salió el primero y luego, un silencio más o menos prolongado, seguido de los gritos destemplados de la empleada doméstica.

8. Al instante en que salí de mi habitación, observé cómo mi papá corría hacia la calle, atravesando la puerta, y a mi abuela detrás.

9. No entendía lo que ocurría… todo era caótico. La empleada seguía gritando, ahora acompañada por mi abuela.

10. Por un instante, mientas yo corría hacia la calle tras mi papá, los gritos cesaron.

11. Al llegar a la puerta, vi una imagen que quedó para siempre grabada en mi memoria.

12. Mi padre estaba congelado, frente al carro en donde mi mamá se encontraba…

13. Al lado de la puerta del piloto había un hombre armado con una pistola, encañonándola directamente.

14. El miedo se reflejaba en el semblante de mi mamá. No pude observar la expresión de mi papá, porque estaba de espaldas a mí.

15. Todo ocurrió en instantes, que en mi mente parecieron horas.

16. A tiempo que apareció otro hombre acercándose por el lado del copiloto hacia el vehículo.

17. El primer hombre abrió la puerta al lado de mi madre, y tirándola del pelo, la obligó a salir.

18. Desde donde yo estaba, veía que los labios de los hombres se movían, pero no alcanzaba a oír lo que decían.

19. Se introdujeron rápidamente al carro, y sin más, salieron huyendo.

20. Vi entonces que mi padre se acercaba a mi mamá, y entonces me acerqué a ambos.

21. Mi mamá estaba muy alterada, pero aun así, nos aseguró que estaba bien.

22. Luego de tranquilizarnos todos un poco, mis padres dieron parte a la policía.

23. No teníamos muchas esperanzas de volver a ver el vehículo.

24. Para nuestra sorpresa, tres días después, la policía nos notificó que había aparecido.

25. No tenía ningún daño. Sólo la llave y la llanta de repuesto faltaban.

26. Mi abuela afirmaba que eso había sido gracias a que ella había hablado con la señora de la carnicería de la esquina.

27. Se decía que esa señora tenía un sobrino que era militar. Otros afirmaban que tenía un sobrino que era delincuente. Tal vez era el mismo

28. En fin; haya sido por la intervención del famoso sobrino o por pura buena suerte, el carrito regresó a nosotros.

29. De hecho, hasta yo lo utilicé para ir a la universidad. Fin.



"¿ONTA MI CARRO?"
@FernandoRamosB

1. Aquí una historia. No tiene narcos, ni balaceras. Llamaré don Luis al protagonista, para proteger su  identidad.

2.  Era don Luis abogado, de los que con nadie se meten, ya ni siquiera litigaba. Tenía su oficina en la zona 4 y afuera parqueaba su carro.

3. Un día, al finalizar la tarde, dejó el trabajo y quiso ir a casa, pero la mala suerte se interpuso y no encontró el carro.

4. Pasado el susto, regresó a la oficina y llamó a su hija, no existían entonces los celulares, para que llegara por él.

5. Don Luis era olvidadizo y no era raro que dejara el carro abierto y con la llave puesta, fue lo primero que le reclamo la hija.

6. Resignados fueron a la policía a poner la denuncia.

7.  Tres días pasaron y el carro no apareció. Al cuarto recibieron una llamada.

8.       — ¿Es usted don Luis? —Sí, respondió don Luis.

9.    — Lo llamamos porque tenemos su carro, estaba abierto y nos lo llevamos, pero si quiere recuperarlo tiene que pagar Q300, le dijeron.

10.   — ¿Qué?, balbuceó don Luis. —Sí señor, le dijeron, son Q300, es lo que costó hacerle el servicio. — Pero yo no pedí ningún servicio.

11.   — Tiene razón, usted no lo pidió, pero nosotros lo hicimos, fue por confusión, no teníamos que llevarnos su carro, pero pasó.

 12.   — Disculpe las molestias, aquí lo tenemos en el taller, puede venir por el carro cuando quiera.
 13.   Don Luis fue por su carro y le explicaron que se parecía al de una señora que pidió que lo recogieran, de ahí la confusión.

14.   Don Luis amenazó con demandarlos por robo y ya no le cobraron los Q300. FIN.


@EsabocaReloaded

1. Cuando mi Papá aún vivía, las fiestas de fin de año era obligatorio pasarlas en familia. Navidad en la finca, Año Nuevo en la casa.

2. Ese fin de año empecé a salir con alguien, así que me vine de la finca el 26 para pasar unos días juntos. El 31 me llevó a casa a las 6.

3. Mi Mamá sólo me vio entrar con el maletín, pero no dijo nada. Ya estaba en la casa para pasar el Año Nuevo en familia. Era lo importante.

4. A las 8 el fulano me llamó a decir que a su amigo JA que iba a Pana, se le arruinó el auto por Chimaltenango y que había que rescatarlo.


5. ¡Teníamos que ayudarlo a pasar el Año Nuevo con sus hijos! Le conté a mi Mamá del amigo tirado en San Lucas (!) y que yo volvía a las 10.

6. Salí de la casa con mi bolso de mano y nada más. En realidad el amigo estaba por Tecpán y decidimos que lo mejor era llevarlo a Pana.

7. Terminada nuestra buena obra de la noche, fuimos a buscar hotel para quedarnos. ¿Habitación disponible en Pana el 31 de diciembre?

8. Empezamos por los hoteles bonitos, pero tuvimos que bajar de categoría. Finalmente encontramos habitación en un hotel de mala muerte.

(Y cuando digo de mala muerte, me refiero a sábanas casi de plástico, almohadas apestosas de bodoques de algodón y arañas en el techo).

9. Al día siguiente tuve que comprar ropa, unas sandalias y artículos de aseo personal. La ropa que llevaba puesta era puro look capitalino.

10. Dos días más tarde, regresé a la casa. Mi Mamá apenas me dirigió la palabra por toda una semana. Fin.



@alegalvarez

1. por razones que no vienen al caso, un día paré de ayudante de tuc tuc y al responder al llamado de una señora que recién salía del mercado

2.con sus canastas y bolsas llenas, al piloto y a mi nos sucedió algo que a cualquier persona le eriza los pelos y le pone chinita la piel
3. resulta que al llegar al destino al que la señora se dirigía, que por cierto era el cementerio de la localidad, ésta olvidó una canasta de
 4. regular tamaño, como es costumbre por estos lares, previo a realizar la devolución de la canasta, decidimos shutear su contenido
5. !!poniéndose blanco como una hoja de papel y soltando un gran poder de Dios el piloto mostró el contenido de la bolsa una cabeza y una mano!
6. una cabeza de ajo de cunén, quiché y una mano de limón criollo. de la señora no volvimos a saber nunca más.

 










June 03, 2013

TUICORRIDOS -segundo cargamento-.



Querido lector:

A pesar que tengo licencia legal para pegar estos corridos en Chisgarabís, el tráfico ha aumentado lo que me acredita (quizá como única) traficante legal de historias escritas en el Twitter sin miedo al arresto. Etiqueta de la cual me siento orgullosa y poderosa. Por ahora traigo otra carga de 4 Tuit-corridos. El material como siempre muy bueno, cocecha de sus orgulloso autores con todo y los sellos al mejor estilo de las aduanas a diferencia que esta vez fue un cruce migratorio de red social.

No digo más, otros Tuitcorridos esperan ser publicados y no soy yo la que tengo que entretenerlo estimado lector. Lea, medite, comparta y quién sabe si también se anima a compartir su Tuitcorrido. ¡He dicho!


"MARGARITA, ¿ESTÁ RICA LA MAR?"
Autor: @JohanBushWalls

1. La vida no siempre es tan jodida. Hay días en los que se sigue muriendo, pero un pequeño evento sirve de suspiro.

2. Cierren las puertas señores, que aquí les vengo a contar, el corrido de la patoja que un poema me supo declamar.

3. No es cosa del otro mundo, solo fue que le dije a una colocha: Me gusta la poesía, y ella respondió a mí me encanta.

4. Me sé completo el poema de “A Margarita Debayle”, me dijo. De inmediato un par de versos le quise recitar, sin ton, ni entonación.

5. No, me dijo, es así, y empezó, no a recitar, a declamar el poema; con expresión corporal y facial, y son y entonación.


6. Ahí me quedé parado, escuchando su declamar. Lo dijo enterito, si que le faltara un verso. Ella emocionada, yo planeando la emboscada.

7. La mente camina desbocada, pero había razón, porque ella no dejaba de mirarme mientras declamaba.


8. El poema a Margarita Dabayle terminó y la colocha se marchó. Ya me voy dijo, tengo cosas que hacer, ni siquiera de beso se despidió.

9.  Aquí les dejo este corrido, como prueba de que a veces también la poesía me ilusiona.


"PERDÍ EL AMOR! PERO ENCONTRÉ MI VERDADERA VOCACIÓN"
Autor: @PamelaGuinea

1. Tenía yo un buen novio a los 16 años.

2. No nos veíamos mucho porque vivíamos lejos, pero nos carteábamos.

3. Una vez se me ocurrió corregir la ortografía de una de sus cartas y mostrársela.

4. Claro, él se enojó mucho y juró nunca hablarme jamás. Y lo hizo.

5. Bueno, sí me volvió a hablar, pero mucho tiempo después.

6. Uno de mis oficios ahora, además de productora, es ser correctora.

7. Ahora él escribe mucho mejor que yo y no cuento más porque seguro me está leyendo. Tan-tan.


¨MASACRE GATUNA"
Autor: @lanticursi

1. Cuando era chiquita, un lindo gatito negro llegó a regalarse a la casa. Era un cachorrito. Rápido me encariñé con el minino.

2. Mi mamá tenía un Nissan Pulsar del 80 que tenía incorporado un ventilador con hélices d metal, para evitar que se sobrecalentara el motor

3. Un día nos subimos, y ella encendió el carro. Desde adentro se escuchó "MIIIIIAAUUUGGGHH RUARRR!!!" *pom pom pom pom*. Yo morí del susto.

4. Mi mamá apagó el carro. Me dijo que entrara a la casa. Pasaron los días, y obviamente no volví a ver al gatito.
5. Temía preguntar, hasta que un día por fin lo hice.

6. —"¿Ese no era el gatito verdad? Es que se oía como él y ya no volvió a aparecer" pregunté —"No. El gatito se escapó" me respondió.
 7. “Ah bueno, ahora ha de vivir en una casa más bonita” –dije, convenciéndome a mí misma.
8. En el fondo siempre supe lo q había pasado pero me negaba a admitirlo. Era demasiado triste para afrontarlo. No se volvió a tocar el tema

9. Hace un par d años le dije a mi mamá “Te acordás d aquel gatito? Te acordás q tal y tal cosa pasó? El gatito se murió despedazado verdad?
10. “Sí.” –me contestó. “Las tripas estaban regadas por todos lados. Pablo (mi tío) tuvo que ayudarme a quitarlas con manguera.”



"TRANSFORMACIÓN RELIGIOSA" 
Autor: @Ximenavillab


1. Ayer me contaban una historia de "tranformación religiosa"
2. Un colombiano acusado de tener $14 millones de dólares en La Cañada estuvo preso algunos años

3. Mientras estaba preso consiguió que su abogado le llevara un encuentro religioso a la cárcel
4. Durante un fin de semana, miembros de Casa de Dios estuvieron dentro de la cárcel transformando a los reos.
5. Al finalizar el encuentro, 272 reos se habían convertido al cristianismo y el colombiano había decidido ser pastor.
6. El colombiano salió libre y ahora dirige una iglesia con 3 mil seguidores en Colombia.

7. Hace unos años invitó a su abogado a Colombia para dar su testimonio. Y contó "así convertí a este hombre malo, es un hombre bueno.